Las Áreas Marinas Protegidas (AMP) son mucho más que simples límites en el mapa; son santuarios que resguardan la biodiversidad, protegen ecosistemas únicos y garantizan el bienestar de las comunidades costeras. En Costa Rica, un país reconocido por su alta biodiversidad, las AMP no solo representan un compromiso con el planeta, sino también una oportunidad para generar modelos de desarrollo sostenible.
Sin embargo, gestionar estos espacios no es una tarea sencilla. Los desafíos incluyen desde conflictos sociales hasta la falta de recursos económicos. A través del análisis de tres AMP emblemáticas –Santa Rosa, Marino Ballena y Cahuita– podemos aprender lecciones valiosas que guiarán futuros esfuerzos de conservación.
Este post está basado en la publicación: Maestro, M., Pérez-Cayeiro, M. L., Morales-Ramírez, Á., & Chica-Ruiz, J. A. (2022). Evaluation of the management of marine protected areas. Comparative study in Costa Rica. Journal of Environmental Management, 308, 114633.
Contexto de las AMP en Costa Rica
Costa Rica es uno de los países más biodiversos del mundo. Con costas tanto en el Océano Pacífico como en el Mar Caribe, sus ecosistemas marinos son hogar de una extraordinaria variedad de especies.
El país cuenta con aproximadamente 169 áreas protegidas, de las cuales 62 son marinas o costeras, lo que representa cerca del 2.73% del área marina total del país. En contraste, un 26% del territorio terrestre está protegido bajo alguna figura de conservación.
A nivel internacional, Costa Rica es reconocida por su compromiso con la biodiversidad, siendo pionera en iniciativas de Gestión Integrada de las Zonas Costeras (GIZC) y políticas marinas innovadoras. Sin embargo, la gestión efectiva de estas áreas no siempre es uniforme. Existen desafíos como la falta de financiamiento adecuado, la presión del turismo no regulado y, en algunos casos, los conflictos con las comunidades locales.
El equilibrio entre conservación, uso sostenible y participación comunitaria es clave para el éxito de las AMP en Costa Rica.
Casos de estudio: Tres AMP en Costa Rica
Las AMP no son entidades estáticas; cada una tiene su propia historia, desafíos y particularidades que reflejan la realidad social, económica y ambiental de su entorno. En Costa Rica, tres ejemplos destacan por sus contrastes y lecciones aprendidas: Parque Nacional Santa Rosa, Parque Nacional Marino Ballena y Parque Nacional Cahuita.
Cada uno de estos parques ha seguido un camino único, con modelos de gestión y niveles de participación ciudadana diferentes. Sin embargo, en conjunto, ofrecen una visión clara de lo que funciona, lo que falla y lo que podría mejorarse en la gestión de las AMP.
Parque Nacional Santa Rosa
📍 Ubicación: Costa Pacífica Norte, Área de Conservación Guanacaste (ACG).
📅 Creación: 1971.
🌱 Área protegida: 120,000 ha terrestres y 43,000 ha marinas.
El Parque Nacional Santa Rosa es un referente en la conservación de ecosistemas terrestres y marinos. Creado inicialmente para proteger los últimos vestigios del bosque seco tropical en el Pacífico Norte, posteriormente amplió su protección a ecosistemas marinos esenciales para la reproducción de especies como las tortugas marinas.
La gestión de Santa Rosa se caracteriza por su enfoque proactivo, donde la ciencia, la participación comunitaria y la planificación estratégica han creado un modelo funcional y transparente. Las decisiones no solo se toman desde el ámbito gubernamental, sino que se apoyan en la experiencia y el conocimiento local.
🌟 Lección clave: La inclusión de la comunidad en las decisiones y la colaboración con instituciones científicas han sido fundamentales para el éxito de la gestión.
🛠️ Desafíos actuales:
- Asegurar financiamiento estable a largo plazo.
- Fortalecer los programas de educación ambiental para involucrar a las nuevas generaciones.
Parque Nacional Marino Ballena
📍 Ubicación: Costa Pacífica Sur, Área de Conservación Osa (ACOSA).
📅 Creación: 1989.
🌱 Área protegida: 115 ha terrestres y 5,375 ha marinas.
El Parque Nacional Marino Ballena es conocido por ser uno de los principales santuarios de las ballenas jorobadas en el Pacífico, atrayendo a miles de turistas cada año. Sin embargo, este parque ha enfrentado serios desafíos en su gestión debido a la falta de recursos económicos, la escasez de personal capacitado y los conflictos históricos entre la comunidad local y las autoridades.
Inicialmente, se intentó establecer un modelo de co-gestión con la comunidad local, pero esta iniciativa fracasó debido a la falta de un marco legal adecuado y de mecanismos claros para su implementación. Actualmente, el parque opera bajo un modelo de gestión centralizada, con esfuerzos recientes para mejorar la comunicación y la participación ciudadana.
🌟 Lección clave: Sin una participación real y constante de la comunidad, la gestión de un área protegida puede enfrentar barreras difíciles de superar.
🛠️ Desafíos actuales:
- Mejorar los canales de comunicación entre las autoridades y la comunidad local.
- Asegurar recursos adecuados para el funcionamiento diario del parque.
- Implementar un sistema efectivo de monitoreo de actividades ilegales, como la pesca no autorizada.
Parque Nacional Cahuita
📍 Ubicación: Costa Caribe Sur, Área de Conservación La Amistad Caribe (ACLAC).
📅 Creación: 1978.
🌱 Área protegida: 1,100 ha terrestres y 22,400 ha marinas.
El Parque Nacional Cahuita es un caso emblemático de gestión participativa exitosa. Desde su creación, las relaciones entre la comunidad local y las autoridades no siempre fueron fáciles. Sin embargo, a lo largo de los años, se logró establecer un modelo de co-gestión, donde el gobierno y la comunidad trabajan de manera conjunta para proteger y gestionar el parque.
En Cahuita, la comunidad tiene un papel activo en la gestión, participando en la planificación, monitoreo y actividades educativas. Parte de los ingresos generados por el turismo son reinvertidos directamente en la comunidad, fortaleciendo así el vínculo entre conservación y desarrollo local.
🌟 Lección clave: La participación activa y continua de la comunidad es clave para el éxito a largo plazo de las áreas protegidas.
🛠️ Desafíos actuales:
- Asegurar la continuidad del modelo de co-gestión ante posibles cambios políticos.
- Mejorar la infraestructura turística para reducir el impacto ambiental del aumento de visitantes.
Lecciones comunes
Estos tres ejemplos muestran que no existe un único modelo de gestión perfecto para las AMP, pero sí principios fundamentales que deben aplicarse en cada caso:
- Participación comunitaria efectiva.
- Educación ambiental constante.
- Financiamiento adecuado y transparente.
Mientras que Santa Rosa y Cahuita han logrado modelos de gestión exitosos, Marino Ballena aún enfrenta desafíos significativos. Sin embargo, cada uno ofrece lecciones que pueden ser replicadas y adaptadas a otros contextos.
El océano no entiende de fronteras, pero sí de acciones concretas. Cada AMP es un recordatorio de que, cuando trabajamos juntos, podemos proteger no solo la biodiversidad, sino también el tejido social y cultural de nuestras comunidades costeras.
Factores clave para una gestión efectiva de AMP en Costa Rica
Gestionar un Área Marina Protegida (AMP) no es una tarea sencilla. Aunque cada parque tiene sus particularidades, existen factores transversales que determinan el éxito o el fracaso de su gestión. Estos elementos clave no solo influyen en la conservación de los ecosistemas marinos, sino también en el bienestar de las comunidades locales y en la sostenibilidad económica de las regiones donde se ubican.
A continuación, desglosamos los cuatro pilares esenciales que sostienen una gestión efectiva de las AMP:
🫂 Participación comunitaria: la base del éxito
Las AMP no son islas aisladas. Su éxito depende en gran medida de la relación que establecen con las comunidades locales, quienes no solo son testigos, sino actores clave en la protección de estos ecosistemas.
- Empoderamiento local: Las comunidades deben sentirse parte activa de la gestión y no simples observadores. Esto implica involucrarlas en la planificación, implementación y evaluación de las estrategias de conservación.
- Educación ambiental comunitaria: Crear conciencia sobre la importancia de las AMP asegura que las generaciones futuras continúen con estos esfuerzos.
- Beneficios tangibles: Las comunidades deben percibir un impacto positivo en su calidad de vida gracias a la existencia del área protegida. Esto puede lograrse mediante el turismo sostenible, la creación de empleos locales y el acceso a programas educativos.
🌟 Ejemplo inspirador: En Cahuita, el modelo de co-gestión ha demostrado que cuando las comunidades son escuchadas y se les da un rol activo en la toma de decisiones, la relación con el área protegida se fortalece y la conservación se convierte en una causa común.
🛠️ Desafíos actuales:
- Superar la desconfianza histórica entre comunidades locales y autoridades.
- Crear mecanismos claros para una participación constante y representativa.
🎓 Educación ambiental: sembrando semillas para el futuro
La educación ambiental es uno de los instrumentos más poderosos para garantizar el éxito a largo plazo de las AMP. No se trata solo de transmitir información, sino de cambiar actitudes y comportamientos tanto en visitantes como en residentes locales.
- Programas educativos locales: Escuelas, centros comunitarios y organizaciones locales deben ser aliados clave en la difusión de valores ambientales.
- Turismo responsable: Los visitantes deben ser educados sobre las reglas de comportamiento dentro de las AMP, evitando acciones que puedan dañar los ecosistemas.
- Voluntariado: Crear oportunidades para que personas locales y extranjeras participen como voluntarios en las AMP fomenta un sentido de responsabilidad compartida.
🌟 Ejemplo inspirador: En el Parque Nacional Santa Rosa, el programa de Educación Biológica ha sido clave para sensibilizar a la comunidad y garantizar su apoyo constante a las iniciativas de conservación.
🛠️ Desafíos actuales:
- Asegurar la continuidad de los programas educativos a largo plazo.
- Adaptar los mensajes educativos a diferentes públicos (turistas, pescadores, jóvenes, etc.).
💵 Financiamiento adecuado: el motor de la conservación
Una AMP sin recursos financieros adecuados es un barco a la deriva. Aunque Costa Rica ha demostrado un fuerte compromiso con la conservación, los fondos destinados a la gestión de las AMP suelen ser insuficientes o mal distribuidos.
- Ingresos propios: El turismo sostenible puede ser una fuente de ingresos importante para las AMP, siempre y cuando exista una distribución justa de los beneficios.
- Transparencia en el uso de fondos: Es fundamental que los recursos sean administrados de manera transparente y eficiente, evitando la corrupción o el desvío de fondos.
- Diversificación de fuentes de financiamiento: No se puede depender únicamente de los fondos públicos. Es necesario explorar fuentes alternativas como alianzas con el sector privado, cooperación internacional y programas de compensación ambiental.
🌟 Ejemplo inspirador: En Cahuita, los ingresos por entradas al parque administradas directamente por la comunidad han permitido reinvertir en infraestructuras y en la mejora de los servicios locales.
🛠️ Desafíos actuales:
- Asegurar que los recursos generados por el turismo se reinviertan en la conservación.
- Crear mecanismos para atraer financiamiento internacional de forma sostenible.
📊 Monitoreo y evaluación: aprender para mejorar
El monitoreo constante de las AMP es clave para evaluar si las estrategias implementadas están funcionando o si es necesario ajustar el rumbo. Sin datos actualizados y confiables, las decisiones carecen de fundamento.
- Indicadores claros: Cada AMP debe contar con un conjunto de indicadores biológicos, socioeconómicos y de gobernanza que permitan medir su desempeño.
- Incorporación de la ciencia: La investigación científica debe ser un pilar fundamental para la toma de decisiones en las AMP.
- Transparencia en los resultados: Los datos obtenidos deben ser accesibles tanto para las autoridades como para las comunidades locales.
🌟 Ejemplo inspirador: El Parque Nacional Santa Rosa ha logrado consolidar un sistema robusto de monitoreo científico que proporciona datos clave para la gestión adaptativa.
🛠️ Desafíos actuales:
- Crear sistemas de monitoreo permanentes, no solo ocasionales.
- Integrar los resultados del monitoreo en los planes de acción de manera efectiva.
La gestión efectiva de un AMP es un acto de equilibrio constante. Requiere recursos económicos, participación activa de las comunidades, educación ambiental continua y un sistema robusto de monitoreo y evaluación.
No basta con proteger un espacio en el mapa; es necesario crear una red de apoyo entre gobierno, comunidad y ciencia que asegure la viabilidad de estos santuarios naturales a largo plazo.
Cada uno de estos factores no funciona de manera aislada. Son piezas de un mismo rompecabezas que, cuando se ensamblan correctamente, permiten que las AMP no solo sobrevivan, sino que prosperen.
Conclusiones y recomendaciones
El análisis de estas tres AMP en Costa Rica revela que no hay una fórmula única para el éxito, pero sí hay principios fundamentales que no pueden faltar: la participación activa de la comunidad, recursos económicos suficientes y una comunicación transparente.
Cada AMP tiene su propia historia, desafíos y soluciones. Sin embargo, una lección es clara: las comunidades locales, especialmente las mujeres, son esenciales para la gestión efectiva de estas áreas protegidas.
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